Hay una parte de vosotros que busca, esa parte es vuestra salvación

Hay una parte de vosotros que anhela encontrar algo que dé sentido a su vida. Hay una parte de vosotros que cree que la vida tiene que ser algo más que lo que conocemos. Hay una parte de vosotros que busca aunque no sepa lo que va a encontrar, aunque no sepa exactamente qué buscar.

Hay una parte de vosotros que busca. Esa parte de vosotros es vuestra salvación.

No ignoréis esa parte. No ignoréis esa parte para conseguir nada. No abandonéis esa parte, no la tapéis, no la anestesiéis, no la ocultéis. Esa parte es vuestro timón. Ese Corazón que os susurra es el que marca la dirección, la dirección en la que debéis continuar vuestro camino. Ese anhelo, esa búsqueda, esa sensación de que tiene que haber algo más, porque efectivamente lo hay.

Y no es algo recóndito, no es algo que esté fuera de vuestro alcance, no es algo que solo los grandes sabios y maestros pudieron llegar a alcanzar, no. Es algo que todos los Seres de esta tierra somos capaces de ver, somos capaces de sentir, somos capaces de escuchar. Es algo que está y que podemos alcanzar, a lo que podemos llegar, podemos.

Ese anhelo es real, ese anhelo es lógico, ese anhelo es parte de vuestra esencia, de vuestra naturaleza.

Hay una parte de vosotros que lo que anhela es volver a encontrarse con su origen, volver a encontrarse con el origen de toda existencia, con la luz, con el todo, con la nada. Hay algo dentro de vosotros que anhela recordar aquello que sabíais antes de nacer, aquello que sabíais antes de llegar a este plano, a esta vida, a esta experiencia. Anhela recordarlo, anhela encontrarse con ello, anhela dar respuesta a todas esas preguntas existenciales, anhela comprender porqué y para qué estamos aquí.

Esa parte de vosotros que pregunta tiene las respuestas.

Para ello tenéis que utilizar vuestro cuerpo espiritual. Conectaros con un Mundo Espiritual que está más allá de la existencia humana. Abandonar el plano físico por un momento y abandonaros en la nada más absoluta hasta que esas respuestas vayan apareciendo. Pueden venir de diferentes formas, no tienen porqué ser mensajes verbales, pueden ser sensaciones, pueden ser imágenes, pueden ser sonidos, pueden ser recuerdos, pueden ser sueños… hay muchas maneras.

Esa parte de vosotros que pregunta tiene su respuesta, y la respuesta solo la podéis encontrar vosotros, solo la podéis encontrar dentro de vosotros y solo la podéis encontrar en el presente más absoluto.

Cuando hablo de recordar no quiero decir que vuestra mente viaje al pasado, no. Es un recordar desde el Corazón, es un volver al Corazón. Es un volver a la esencia, es un volver a la luz, es un volver al Todo, es un volver a la unión, es un volver al origen.

Esa respuesta solo puede estar dentro de vosotros cuando abandonáis toda distracción externa, todo tiempo diferente al presente absoluto, cuando abandonáis el cuerpo físico, cuando abandonáis la mente pensante y os caéis en el silencio entre pensamientos, en el espacio absoluto y esperáis, esperáis atentos, esperáis esa respuesta. Esa respuesta siempre llega.

Ese anhelo va a estar colmado, ese anhelo va a tener su respuesta. Para ello no debéis abandonar, o ignorar, esa parte que lo anhela, esa parte que pregunta. Pues esa parte es vuestra salvación, esa parte es la que os va a llevar a la paz eterna, esa parte es la que os va a llevar a la iluminación, esa parte es la que os va a llevar a encontrar el sentido de vuestra vida, a encontrar la respuesta a todas las preguntas.

No hay respuesta si no hay pregunta. No ignoréis esa parte, no la rechacéis, no la ocultéis. Dadle valor, dadle voz a esa parte que pregunta.

Pero no preguntéis desde la mente, por ahí nunca vais a encontrar la respuesta.

No preguntéis a otra persona, por ahí nunca vais a encontrar la respuesta.

No preguntéis en el pasado o en el futuro, ahí nunca vais a encontrar la respuesta.

No busquéis en el plano físico, en lo que veis, escucháis o sentís en esta experiencia, en el entorno que os rodea, no.

Tenéis que ir al Corazón. Tenéis que conectar con el Mundo Espiritual, tenéis que conectar con La Fuente. Tenéis que conectar con Dios, y ahí es cuando aparecerán las respuestas.

No busquéis las respuestas en esta experiencia física, buscadlas en el Corazón, pues el Corazón es la única parte de vuestro Ser que está directamente conectada con todo El Universo.

Conectaos con el Todo, y desde ahí recordaréis, pero no hagáis el esfuerzo de recordar. No es recordar a través de la mente, no es recordar como estáis acostumbrados a recordar. Es un volver a… Volver al origen, volver al Corazón, volver al Todo, volver al Universo.

Es ir hacia dentro y conectar con lo que está más allá de vosotros. Y en esa conexión es cuando recordaréis, sin hacer el esfuerzo de recordar. Es cuando recordaréis sin meter a la mente en la tarea, es cuando recordaréis sin esfuerzo alguno, de forma inevitable.

La respuesta llegará, es una respuesta inevitable.

Sabréis que es la respuesta a vuestras preguntas, lo sentiréis como tal, sentiréis una Verdad absoluta, una certeza, una claridad. Será algo que no tenéis que validar con otra persona. Es algo que sentís que es cierto sin necesidad de contrastarlo.

Esa respuesta es vuestra, esa verdad es vuestra, ese recuerdo solo puede ser vuestro.

Id hacia dentro, hacia el Corazón, y re-cordar.

Esa parte de vosotros que pregunta encontrará su respuesta.